Si hace unas semanas se comentaba que la inestabilidad de Asia podría desencadenar en un descalabro turístico mundial, con las nuevas tensiones sociopolíticas que se están viviendo con especial intensidad en Oriente Medio y Norte de África en países como Túnez o Egipto, vienen a confirmar que el turismo es uno de los grandes perdedores en cuanto a consecuencias globales se refiere.

Según los datos publicados en enero de este año por la Organización Mundial del Turismo, este sector en Oriente Medio supone el 6,4% de la cuota mundial, con 60 millones de turistas internacionales en 2010, habiendo experimentado una subida con respecto al año anterior del 13,9%. En el caso del norte de África, los datos rozan los 19 millones de turistas internacionales, lo que supone un 2% de la cuota mundial y un incremento del 5,8% con respecto al 2010. Ambos países tienen en este sector, su estrategia económica más solvente y hasta el momento, mas rentable. Por todos es conocido las riquezas culturales y naturales de ambos países.

Esta inestabilidad ha provocado un cambio brusco en la decisión de compra de los turistas. Según han hecho públicos entidades españoles como la Confederación Española de Hoteles y Alojamientos Turísticos (CEHAT) o la Federación Española de Agencias de Viajes (FEAVV), España es uno de los grandes beneficiados por esta situación, ya que muchos turistas por precaución, miedo o por las propias recomendaciones del Ministerio de Asuntos Exteriores y Cooperación de España que desaconsejan cualquier tipo de viaje a estos destinos.

Tendrá razón aquel dicho popular español que dice que el turismo sigue siendo la gallina de los huevos de oro, ya que aunque la crisis económica mundial sea incluso más pronunciada en España por los negativos datos del empleo entre otras cosas, este sector ha crecido en 2010 llegando a los 57,2 millones de turistas internacionales, un 1% más que el año anterior. El año 2010 cerró con un crecimiento del gasto total del 3,0%, donde el llevado a cabo por los turistas crece un 2% hasta alcalzar los 28929 millones de euros.