Tras la reciente Asamblea General de la Organización Mundial del Turismo celebrada Corea, hoy se está celebrando en París la tercera reunión de los máximos responsables de Turismo de las principales economías del mundo más España, país invitado permanente a este Foro denominado T-20. Aunque nada tiene que ver con el mediático G-20, que ocupa todas las portadas de los medios de comunicación, guarda fuertes sinergias ya que se discute sobre la recuperación económica, el empleo, la economía sostenible, el comercio, la inversión y el desarrollo.

Esta iniciativa nacida hace dos años en Londres, en otra celebración de Asamblea General y por lo tanto respaldada por Naciones Unidades, tiene en sus manos el estímulo de los viajes como principal fuente de empleo y recuperación económica, ya que son conscientes de que esta industria es actualmente la más potente del mundo. Cabría decir que con la situación económica actual a nivel internacional, es incluso más importante que el polémico Foro global.

El Turismo internacional es una de las industrias que menos ha sufrido la crisis mundial y que ya presenta unas cifras que son por lo menos, esperanzadoras. Con respecto al año 2009 el turismo internacional aumentó en 2010 una media de un 6,6%, resultante del crecimiento del 5,1% de las economías avanzadas y el 8,8% de las economías emergentes. En total, más de 940 millones de turistas internacionales que han supuesto unos ingresos por turismo internacional valorados en 693.000 millones de euros.

Irónicamente parece ser que el T-20 es de los pocos organismos conocedores de que el turismo es el principal vehículo para la creación de empleo y la recuperación económica, y que puede liderar el cambio global hacia una economía sostenible real. ¿Toc, toc? ¿Nadie más ha leído las cifras? Posible o no, es de agradecer que este sector clave para la economía de muchos países, haya decidido tomar las riendas de un cambio, basándose en una industria que genera riqueza y empleo, por no hablar del reconocido bienestar social.

La primera reunión del T-20 terminó con los ánimos muy positivos, y fue donde la OMT decidió apoyar esta iniciativa y considerar que los resultados de la misma eran un aporte importante al proceso de la Hoja de Ruta para la Recuperación aprobado anteriormente en su Asamblea. En la segunda, se identificó la contribución de los Viajes y el Turismo para el crecimiento económico y el desarrollo, haciendo un especial hincapié de la necesidad que tiene el sector de ser realmente protagonista del cambio como principal industria del mundo y con las cifras de futuro que ya maneja la Organización. Se espera que esta tercera reunión se puedan analizar las estrategias de futuro y los pasos que ya se han venido marcando.

Se estima que en 2030 habrá más de 1800 millones de turistas internacionales, el doble que actualmente, creciendo a una media del 3,3% anual, lo que supondrá unos 43 millones de turistas más anuales en el mundo. Turistas que consumen productos y servicios turísticos, y que generan por simple efecto multiplicador, riqueza y empleo. Aún así, quizás por falta de interés social o por costumbre histórica salvadora (como nuevamente en el caso de España con la crisis del Norte de África), el Turismo como lamentó en Corea la OMT y como se empieza a investigar en la Universidad, no es noticia en los medios de comunicación aunque pueda serlo por razones obvias.

A falta de un Ministerio de Turismo propio y exclusivo, como es en el caso de España y que el sector empieza a demandar con iniciativas muy positivas, esperemos que el T-20 sea capaz de estimular y potenciar la realidad de la importancia del Turismo, y que empiece a ser noticia en portada por lo menos de todos aquellos países que (sobre)viven de la principal industria del mundo.

Ya lo dijo Enrique IV asumiendo su conversión católica sin querer hacerlo… “Paris bien vale una misa”, por lo que si el sector turístico tiene que ir a misa, confesar sus pecados o encender velas por cada plegaria para que se cumplan las expectativas de crecimiento, debe hacerlo tomando el ejemplo político del T-20, que ha sabido crear un Foro constructivo en un sector clave mundial, y que esperemos que en estos dos días de reuniones saquen conclusiones positivas y de futuro que sirvan para la recuperación económica global.