Hasta ahora el sector turístico español se ha visto beneficiado por la estabilidad política interna y la inestabilidad de nuestros principales competidores en el Mediterráneo. Esta circunstancia, junto con el buen hacer de los empresarios del sector, provocó que en el año 2016 se consiguiera superar la barrera de los 75 millones de visitantes, logrando así un récord histórico. Con estos antecedentes, el año 2017 se preveía mejor todavía… Pero, ha surgido un problema: el conflicto catalán y su influencia en la imagen de España.

2017, un año histórico para el turismo….”a priori”.

Las estadísticas de primeros de año describían una realidad muy positiva, tanto en términos de afluencia de visitantes como de ingresos, de tal manera que se mejoraban los registros de 2016 en los primeros meses, a pesar de que el listón estaba en cifras de record. Según la mayoría de los analistas del sector se preveía que el 2017 sería el mejor año de la historia. Así se expresaba el diario Expansión en su Artículo: España, ante el desafío de convertirse en líder mundial del sector turístico.

Así mismo, los principales directivos del sector se mostraban muy optimistas. Según la consultora Deloitte, en su informe Expectativas Turismo 2017: “El sector prevé para 2017 la llegada de más turistas, precios hoteleros más altos y mejoras en los servicios que se ofrecen. El optimismo en el sector es generalizado y siete de cada diez directivos (en concreto, un 67%) del ramo esperan un crecimiento superior al del último año. El pasado ejercicio, los directivos del ramo ya anticiparon que el crecimiento de esta industria sería bueno. E incluso se quedaron cortos, ya que un 73% de los encuestados al acabar el ejercicio aseguran que la evolución del sector ha sido mejor o mucho mejor de lo esperado”.

Pero aparecieron las nubes y la tormenta por el nordeste.

Resulta interesante analizar como los hechos ocurridos en Cataluña en los meses de septiembre, octubre y noviembre han supuesto un jarro de agua fría sobre las expectativas del sector.

Todavía está por ver en que medida lo ocurrido en Cataluña ha modificado la percepción de los potenciales clientes de nuestro país, sobre todo en aquellos que son nuestros principales clientes (Británicos, Alemanes y Franceses).

Para hacer un repaso breve de los acontecimientos, recomendamos el Timeline elaborado por Hosteltur: Un mes de vértigo para el turismo en Cataluña del cual destacamos algunos puntos:

  • 26 de septiembre: El ministro de Energía, Turismo y Agenda Digital, Álvaro Nadal, declara:
    «El impacto que está teniendo la situación política en Cataluña es mayor que el que han tenido los atentados«
  • 27 de septiembre: Kike Sarasola, fundador de Room Mate Hotels, advierte: “La imagen que estamos dando fuera de inestabilidad es un desastre para el empresario, para la economía, para los catalanes…” El Gremio de Hoteles de Barcelona responde: «El turismo se mantiene con normalidad«.
  • 1 de octubre: Pese a la prohibición, se celebra el referéndum de independencia en Cataluña el 1 de octubre. Las imágenes de cargas policiales dan la vuelta al mundo.
  • 3 de octubre: Jornada de huelga en Cataluña, con manifestaciones en las calles y cortes de carreteras. El Reino Unido avisa sobre el riesgo de viajar a Cataluña: «Se pueden producir manifestaciones sin previo aviso que pueden escalar».
  • 20 de Octubre: Tras los atentados del 17 de agosto y los sucesos de octubre en Cataluña, los viajeros comienzan a percibir Barcelona como un destino menos seguro
  • 26 de octubre: Se multiplican los avisos de peligro para el sector turístico:
  • 27 de octubre: El presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, da marcha atrás en el intento de convocar elecciones anticipadas. El día 27, el Parlament de Cataluña declara la independencia y el Senado aprueba el artículo 155. El Gobierno español cesa el Govern y convoca elecciones anticipadas el 21 diciembre.
  • 2 de noviembre: La juez de la Audiencia Nacional ordena el encarcelamiento de los miembros del Govern y Puigdemond huye a Bélgica.

….. La historia continúa….

Repercusiones y perjuicios cuyo efecto está todavía por evaluar.

Como afirma Gloria Guevara, Consejera Delegada de WTTC (World Travel & Tourism Council): en una entrevista a la Agencia EFE: “el conflicto está afectando al crecimiento del turismo y «desafortunadamente» también al empleo y es «muy triste» lo que está ocurriendo en España, sobre todo por el avance turístico de los últimos años, impulsado por las buenas políticas públicas del Gobierno a nivel país y administraciones locales y, adicionalmente, por la buena imagen de un país estable y seguro».

Según sigue afirmando, “España se ha beneficiado como destino turístico de su mensaje de país seguro, con crecimiento y una política económica correcta, en favor de negocios y empleo, pero ahora el sector mundial está preocupado por la inestabilidad que se percibe en el exterior y que no se sabe cuánto tiempo va a durar. Algunas empresas pertenecientes a WTTC han registrado cancelaciones de congresos que iban a venir a Madrid y Valencia, lo que muestra que la situación está afectando la reputación de España como país con estabilidad».

Por todos estos acontecimientos internos y por el creciente grado de estabilidad de las sociedades y economías de nuestros competidores naturales se empieza a ver que el este año 2017 no va a resultar tan idílico como al comienzo del mismo se preveía, y que puede que los próximos tampoco lo sean. Como decía Benjamín Franklin: Se requieren muchas buenas obras para construir una buena reputación y sólo una mala para perderla.