La localidad murciana de San Pedro del Pinatar acogió el ‘Congreso Historia y Misterio‘, en el que mi hermana, María, y yo participamos en calidad de profesoras del Grado en Historia de la Universidad a Distancia de Madrid, UDIMA. Tres días que impulsan a que en 2024 se celebre la segunda edición del congreso.
Desde la noche del viernes 21 de abril, en que se emitió en directo el programa de radio desde San Pedro del Pinatar, hasta el final de la mañana del domingo 23 de abril, la Casa de la Cultura fue el escenario de las ponencias y reflexiones, por orden de intervención, de Miguel de Lucas, Aldo Linares, Carlos Largo, Miguel Pedrero Gómez, Pablo Villarrubia Mauso, Laura Lara Martínez, María Lara Martínez y Gregorio León Armero, quienes llegamos hasta ese hermoso rincón de la región de Murcia a petición de Joaquín Abenza y María José Garnández, director y productora del programa «El Último Peldaño» en Onda Regional de Murcia, en el que realizamos el espacio de Periodismo de investigación histórica y de misterio «Informe Lara». El objetivo: celebrar el Día del Libro.
Nuestras conferencias versaron sobre «Pasaporte de bruja. La racionalización del misterio en la España imperial» (María) y «Fake news de la Historia Contemporánea de España» (Laura).
Bulos sobre la expulsión de los judíos y el descubrimiento de América, el vuelo de las brujas, Alonso de Salazar y Frías -el inquisidor razonante en Zugarramurdi-, Juana «mal llamada La Loca», que será la protagonista del próximo libro de María Lara, el enigma del oro de Moscú, la falsedad del caso Ummo, Raimunda «que salía en el Telediario» con las psicofonías a inicios de los años 90…, protagonizaron nuestras conferencias.
Y, por supuesto, el discurso en pro de la tolerancia, de la defensa de las personas que son convertidas por otros en chivos expiatorios en cualquier época, circunstancia o lugar del planeta, la lucha desde la dialéctica y la justicia contra el acoso escolar (bullying) y laboral (mobbing), el devolver a los personajes históricos su condición de seres humanos (de personas sin máscara y sin armadura, desprovistos de esa falsa imagen de actores del pasado), así como el respeto desde el pensamiento exclusivamente cientificista a la frontera invisible que separa, o más bien, acerca, lo paranormal a lo sensorial. Porque todos somos energía y una mezcla de materia, orden y caos en ese dualismo platónico de alma y cuerpo.
Doctora en Filosofía. Profesora de Historia Contemporánea.
Udima, Universidad a Distancia de Madrid