En Octubre del 2017 recibía el premio nobel de Economía el estadounidense Richard Thale por su contribución, a la economía del comportamiento, esto es, unir psicología y economía. Su mérito está en señalar e investigar sobre tres rasgos que influyen en las decisiones económicas y como eso afecta tanto a sus decisiones individuales como a los resultados del mercado:

  • La racionalidad limitada,

  • Las preferencias sociales y la percepción de la justicia

  • La falta de autocontrol de los ciudadanos

Rasgos que explican porque el individuo se deja llevar más por el porcentaje de un descuento que por la cuantía del mismo, o pide un préstamo al consumo en el banco (con un interés más alto de lo que están remunerando sus ahorros), antes que disponer de sus ahorros.

Hoy, 15 de Noviembre, se reúnen en Madrid cuatro expertos mundiales en robótica, inteligencia artificial, biología y evolución humana, para debatir el destino del ser humano. Todo apunta a que la innovación y la revolución tecnológica incrementa los niveles de desigualdad, cuando lo que persigue cualquier política económica es mejorar la calidad de vida de los más desfavorecidos.

Para ampliar más al respecto dejo este enlace:

El mundo en 2050. La transformación del ser humano: https://elpais.com/agr/el_mundo_en_2050/a