El Observatorio del Ciclo Económico en España, una iniciativa conjunta de la Fundación Rafael del Pino, BBVA Research y Fedea, ha lanzado su décima edición que se centra en el comportamiento de la economía española en el año 2022.
Esta versión del observatorio analiza los factores que explican el crecimiento de la producción, la inflación y los salarios reales, así como la evolución del Indicador de Entorno Empresarial en comparación con la UE8.
A pesar de que el PIB por población en edad de trabajar ha crecido durante los cuatro trimestres de 2022 a tasas interanuales promedio cercanas al 5%, todavía se encuentra un 2,3% por debajo de su nivel en el último trimestre de 2019, antes de la pandemia.
Además, las perturbaciones de oferta, como los márgenes salariales, los márgenes de precios y las perturbaciones en la inversión en capital residencial, explican los 1,5 pp del crecimiento observado en 2022.
La tasa de desempleo ha aumentado ligeramente al 13,0% en el último trimestre de 2022, y la ratio de vacantes sobre desempleo ha pasado de un promedio de 0,03 en 2019 a 0,05 en el mismo periodo de 2022.
En cuanto al crecimiento interanual del PIB por PET en el último trimestre de 2022, se explica íntegramente por el incremento de las horas trabajadas, ya que la productividad por hora trabajada no ha contribuido.
Además, se ha producido una disminución drástica de la participación de los salarios en la renta agregada, que ha disminuido al 50,2% en el mismo periodo. El crecimiento del deflactor del PIB en 2022 se debe fundamentalmente a los factores de demanda, mientras que los factores de oferta tienen una ligera aportación negativa.
Por el lado de la demanda, contribuyen positivamente al crecimiento interanual del deflactor del PIB las perturbaciones del sector exterior, el consumo y vivienda, y el freno a las presiones inflacionistas que supone la política monetaria.
Por el lado de la oferta, el comportamiento de los márgenes de salarios y de los márgenes de precios explican la mayoría de la contribución negativa al crecimiento de la tasa de inflación interanual del deflactor del PIB.