El verano se acaba y con él se acaban los calores, las temperaturas altas, las olas de calor. Pero no por eso se acaba el viajar. Sino que empieza una época que es perfecta para tomarse unas vacaciones. Y es que el otoño ofrece una paleta de colores más cálidos y, por supuesto, temperaturas más frescas, por lo que se ha convertido en un momento para aquellos viajeros que no les importa trabajar en verano.
En España, el otoño ofrece una variedad de sitios de interés que merecen una visita, cada uno con sus características particulares y sus pros y contras. De hecho, viajar en otoño tiene muchas ventajas, como por ejemplo tener un clima más agradable, con temperaturas más suaves, lo que permite hacer más actividades al aire libre sin tener que estar sudando o quemándose bajo un sol abrasador. Además, las lluvias son menos frecuentes, lo que facilita la exploración sin contratiempos climáticos.
Como se trata de una estación que es menos dada a las vacaciones, hay menos afluencia de turistas, lo que favorece que las visitas a lugares emblemáticas sean más fáciles y más bonitas, ya que al menos no hay que luchar por una foto sin nadie por en medio.
Al no tener tantos turistas, los precios también se apaciguan. No solo en los alojamientos, sino también en las actividades turísticas, lo que favorece el ahorro de dinero por parte de los viajeros en comparación con los costos elevados de los meses de verano.
El otoño también ofrece un catálogo de festivales y actividades culturales bastante amplio en España. Por ejemplo, es muy importante la Fiesta de la Vendimia en La Rioja, donde se puede disfrutar y aprender de los mejores vinos a nivel internacional. Hasta la Fiesta de la Castaña en Galicia, en la que se podrá disfrutar de una gastronomía basada en este ingrediente que se recoge precisamente en los meses de otoño.
Ahora bien, no todo es un camino de rosas, sino que viajar en otoño también tiene algunos inconvenientes. No hay que olvidar que los días se acortan debido al cambio horario, lo que significa menos luz solar durante el día, lo que puede complicar el poder hacer actividades al aire libre.
En algunas regiones turísticas, especialmente en destinos costeros, algunas atracciones pueden cerrar o reducir sus operaciones después de la temporada alta de verano, lo que puede limintar el entretenimiento y las actividades que pueda hacer el viajero. Y tampoco hay que olvidar el riesgo de encontrarse con mal tiempo, aunque el caso de las lluvias sean menos frecuentes, pero puede pasar, ya que en caso de lluvia suelen ser más imprevistas y más intensas. Los viajeros entonces deben de estar preparados para estos cambios de tiempo.
Los mejores lugares para visitar en otoño en España
España es un país donde viajar en otoño tiene su encanto. Hay muchos lugares donde se puede disfrutar de una naturaleza llena de los colores ocres, marrones, rojizos y mostaza que ofrecen los árboles al caer sus hojas. Estos paisajes son espectaculares y siempre merece la pena verlos.
Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido, en Aragón. Este parque nacional ofrece espectaculares paisajes montañosos, con colores otoñales que pintan los bosques de un dorado y rojo vibrante. Las rutas de senderismo son perfectas para disfrutar de la naturaleza en esta época del año. Y encima no hace mucho frío, por lo que es ideal para esta época del año.
Granada y la Alhambra, Andalucía. El otoño es un momento ideal para visitar la Alhambra y los Jardines del Generalife en Granada. Las temperaturas más frescas hacen que explorar estos impresionantes palacios y jardines sea mucho más agradable.
Santiago de Compostela, Galicia. Esta ciudad histórica es famosa por su Catedral de Santiago y el Camino de Santiago. En otoño, los colores de los bosques gallegos son deslumbrantes, creando un telón de fondo impresionante para los peregrinos y los visitantes.
Viñedos de La Rioja. La vendimia en La Rioja es un evento emblemático del otoño español. Visitar los viñedos y bodegas durante esta temporada permite conocer de cerca el proceso de elaboración del vino y degustar las mejores cosechas.
Sierra Nevada, Andalucía. Esta cordillera, ubicada en Andalucía, es el hogar de la estación de esquí más meridional de Europa. En otoño, las montañas se cubren de nieve, ofreciendo una experiencia única para los amantes de los deportes de invierno.
Ruta del Quijote, Castilla La Mancha. Esta ruta turística, que recorre la región de La Mancha, es un homenaje a la obra maestra de Miguel de Cervantes. En otoño, los paisajes manchegos están en su máximo esplendor, con campos de trigo y girasoles.
Ruta de los Pueblos Blancos, Cádiz. Esta ruta turística, que recorre la provincia de Cádiz, es una muestra de la belleza de la arquitectura tradicional andaluza. En otoño, los pueblos blancos se tiñen de colores otoñales, creando un ambiente mágico.
Con una planificación adecuada, esta época del año puede ser el momento perfecto para viajar y disfrutar de todo lo que el país tiene que ofrecer.
La verdad es que cualquier momento es perfecto para viajar, pero viajar con menos turistas, mejores precios de alojamiento y de consumo en general siempre es mejor. Así que hay que aprovechar estos momentos que nos regala la vida.