El pasado 18 de julio se celebraron las IV Jornadas de Turismo del Departamento de Turismo y Marketing de la Universidad a Distancia de Madrid (UDIMA) articuladas bajo la temática “Innovación y Turismo”. La sesión puede visualizarse “on-line”. Durante las jornadas se trataron temas tan diversos como la sostenibilidad ambiental, la tecnología, tanto desde el punto de vista del revenue como de las aplicaciones para móviles, las nuevas normativas que afectan al sector o las principales modalidades turísticas.
A modo de conclusión de las jornadas, hay que destacar que la innovación debe entenderse como una oportunidad constante de desarrollo que favorece la competitividad, el crecimiento, la calidad y la excelencia, no sólo como una tendencia. La supervivencia de las empresas turísticas actuales pasa por su adaptación continua al mercado y eso solo se consigue redefiniendo sus productos, sus modelos de gestión, sus canales de comercialización, además de creando sinergias con otros agentes del sector con el fin de generar redes para trabajar en la innovación del sector turístico.
Resulta fundamental para el desarrollo sostenible de los destinos que todos los agentes locales o stakeholders trabajen bajo el concepto de desarrollo sostenible. Las empresas turísticas, por tanto, tienen que asumir su responsabilidad con el entorno en el que se integran, tomar conciencia sobre los problemas tanto sociales, medioambientales y económicos y actuar al respecto. Los clientes cada vez más demandan y se comprometen con las empresas responsables. Así, el desarrollo sostenible asegura que se respete el medio ambiente y se mejore la calidad de vida de la población, ayudando a evitar o minimizar los impactos económicos, sociales y medioambientales negativos que se puedan producir en un área geográfica. Por tanto los hoteleros deben buscar el equilibrio entre la minimización de estos impactos y la satisfacción del cliente. Tema desarrollado en la ponencia “Turismo y medio ambiente: la racionalidad ambiental aplicada a las actividades hoteleras”.
La necesidad de innovar hace que la inversión en tecnología cobre cada vez más importancia en el sector turístico. La tecnología nos permite comprender y conectar con el cliente, cada vez más informado, hiperconectado y multidispositivo. Los avances tecnológicos que estamos viviendo en la actualidad permiten la cobertura de todas las fases de la cadena de valor del viaje: inspiración, planificación, compra, estancia en el hotel y el compartir la experiencia. Si se logra añadir valor real mejorarán tanto los procesos de captación como los de retención de los clientes. La diferenciación viene también marcada por la implantación de novedades que hagan a una empresa y a los productos y servicios que ofrece únicos y exclusivos. Hay que innovar en la búsqueda de nuevos segmentos de mercado, en la comercialización, en las tendencias. La innovación en la comercialización ha sido el tema de la ponencia “La tecnología y la comercialización hotelera: los sistemas automatizados de revenue management”.
La posibilidad de diferenciación es posible si la empresa aumenta el conocimiento del cliente y utiliza esa información en su comercialización y operaciones. Las tecnologías están ayudando a las empresas turísticas a realizar una mejor segmentación de la demanda y ofrecer productos adaptados a las preferencias de los consumidores con la finalidad de aumentar su conversión y conseguir la entrega de una experiencia personalizada que sirve el producto adecuado al consumidor correcto en el momento adecuado es decir, la personalización del proceso de compra. La ponencia “Nuevas modalidades turísticas en un mundo cambiante ¿tradición o modernidad?” ha profundizado en el conocimiento de la demanda y los nuevos perfiles de turistas. Y la ponencia “Aspectos a tener en cuenta para la aplicación de la normativa sobre alérgenos en alimentos sin envasar” ha destacado como la normativa también vela porque el consumidor esté informado y tenga capacidad de decisión.
Es por tanto un realidad que el el entorno móvil y las aplicaciones, el big data, las herramientas de business intelligence (BI), el internet de las cosas o la realidad virtual, tendrán un papel fundamental en el sector turístico en los próximos años y así lo hemos visto en la ponencia “Madrid industrial itinerarios, un ejemplo de m-learning aplicado al patrimonio industrial”, en la que la tecnología es la base para difundir el patrimonio cultural.