Hace tan sólo unos meses, los periódicos de todo el mundo se hicieron eco de una noticia difícil de creer: “Una joven croata despierta de un coma hablando alemán”. La chica, de 13 años de edad, habían permanecido en ese estado durante 24 horas, probablemente por haber sufrido una temperatura corporal extremadamente alta.
Al despertarse era incapaz de hablar su lengua materna, el croata, y sólo se comunicaba empleando un alemán bastante correcto. Lo curioso del caso es que la chica había estado estudiando alemán justo antes de caer enferma, pero despertó con un nivel muy superior al que tenía anteriormente. El caso todavía sigue en estudio, pero despierta interesantes interrogantes sobre el funcionamiento y reorganización del cerebro después de sufrir un trauma.