La sangría en el sector de los medios de comunicación no para. El grupo Prisa ha anunciado una reestructuración de su plantilla en España, Portugal y América, lo que va a provocar que 2.500 trabajadores se vean en la calle de manera gradual y hasta el primer trimestre de 2012. Esto supone un 18 por ciento del total de empleados y se realizará de la siguiente manera: 2.000 personas de España y 500 entre el país vecino y América. Incluso, el comunicado de este importante grupo mediático habla de una segunda fase donde serían los trabajadores del continente americano quienes estarían plenamente afectados por este plan, cuya finalidad es «actualizar su modelo productivo y de negocio para garantizar la sostenibilidad de la compañía».
Mientras, los representantes de los trabajadores critican que esta decisión se ha tomado sin tener un plan industrial ni de negocio sobre la mesa, sino que se ha optado simplemente por recortar costes.