Una ciudad inteligente (smart city) es una ciudad que entre otras cosas pueden tener wifi para que los ciudadanos se conecten con sus móviles inteligentes (smart phones). La ciudad recibe la información como el estado de tráfico de sus calles, tiene información de los servicios de los que dispone, como restaurantes, puntos turísticos interesantes, transporte público, etc. Los ciudadanos con sus smart phones son capaces de orientarse teniendo a su disposición todos los servicios de la ciudad, planificándose según sus preferencias. Por tanto, de esta manera sería muy fácil hacer turismo en otras ciudades, simplemente con llevarse su smart phone y tener la aplicación correspondiente instalada. Esto beneficia tanto a ciudadanos como a las empresas de servicios.
Hay gran cantidad de proyectos europeos que apoyan esta iniciativa, y esperemos que el día de mañana se extienda tanto el término de smart city como está actualmente extendido el concepto de smart phone.