El Museo de Arte Abstracto Español, ubicado en las Casas Colgadas de Cuenca, recibió el pasado viernes 14 de junio el Premio Glauka 2013, que anualmente concede la Asociación de Amigas de la Lectura para reconocer a personas o instituciones que hayan contribuido al desarrollo de la lectura y de la cultura. Como nos ilustró en su magistral discurso la Escritora y Profesora de la UDIMA María Lara, Presidenta de las Amigas de la Lectura, el nombre de este prestigioso galardón está tomado de la protagonista de la novela La vieja sirena de José Luis Sampedro, la cual se halla ambientada en el Egipto del siglo III, una época de cambios y confusión en la que dos grandes imperios, el romano y el persa, inician una lenta decadencia, mientras que la protagonista, Glauka, envuelta en su belleza y misterio, recorre un apasionante itinerario hasta llegar a Alejandría.
El Museo de Arte Abstracto Español de Cuenca constituye un referente a nivel internacional en tanto que exhibe una amplia colección de pinturas y esculturas de artistas españoles de la generación abstracta de los años 50 y 60, quienes configuraron las tendencias abstractas más representativas del arte contemporáneo de mediados del siglo XX.
La pinacoteca responde a la iniciativa de Fernando Zóbel (Manila, 1924–Roma, 1984), quien deseaba reunir su colección abstracta en un espacio singular en el que pudiera ser contemplada por el público aficionado y experto en la materia. Y qué mejor que las Casas Colgadas, un edificio medieval de finales del siglo XV que se muestra altivo sobre la Hoz del Huécar como si de una obra cubista se tratara.
De esta forma se gestó el Museo de Arte Abstracto, que abriría sus puertas el 1 de julio de 1966 en este edificio municipal único en el mundo. En 1980 Zóbel donaría su colección a la Fundación Juan March para que velara por el cumplimiento de su voluntad. Desde entonces, se han incrementado los fondos del museo con recursos propios y mediante la adquisición de obras.
En palabras de la Presidenta María Lara, pronunciadas en la gala de entrega del Premio Glauka, «esta institución fue el primer museo de arte moderno que hubo en España, pues fue el que se atrevió a romper los esquemas del arte clásico. Gracias a Zóbel, Cuenca inició su andadura como colonia de artistas, en la ciudad abstracta, los pintores buscaron las raíces culturales para construir sus casas acorde con su Historia. La Plaza Mayor era el salón común de todos ellos y la pinacoteca de Zóbel, hecha entre los pintores, pasó a ser conocida como el museo de los artistas. Hoy nos congratulamos de galardonar con el Premio Glauka al Museo de Arte Abstracto Español, artífice y garante de las lecturas de vanguardia en las hoces polícromas».
El galardón fue recogido por Manuel Fontán, Director de Exposiciones de la Fundación Juan March y Director del Museo de Arte Abstracto Español de Cuenca, acompañado por Antonio Garrote, Coordinador del Museo. En esta ceremonia de las Artes y las Letras se rindió homenaje a José Luis Sampedro, Padrino de la Asociación, contando el acto con el testimonio de Olga Lucas, viuda del escritor, y con la colaboración de Begoña Marlasca, directora de la Biblioteca Pública del Estado en Cuenca.
Laura Lara Martínez.