La legislación española ha impuesto el juego limpio, desde la regularización voluntaria por parte del contribuyente a la declaración a través del modelo 720 -declaración sobre bienes y derechos situados en el extranjero- es una obligación tributaria de carácter informativo que tiene como objetivo la declaración de la información respecto de bienes y derechos de contenido económico ubicados o gestionados en el extranjero, de tal forma que la Agencia Tributaria tiene recursos y mecanismos para el control, sin olvidarnos de todo lo que ofrece la explosión del Big Data, trazabilidad de las operaciones, tarjetas de crédito, entidades financieras, compañías aseguradoras, etc.
Una prevención eficaz permitiría la bajada de la presión fiscal, el crecimiento económico y el desarrollo sostenible de la sociedad, acorde al estilo de vida que toda familia desea para sus hijos.