Tradicionalmente, la mujer ha ocupado una posición preponderante a la hora de consumir productos; sobre todo aquellos que tienen que ver con el ambiente hogareño y sus derivados. Las decisiones «fuertes» se dejaban a los hombres. Los roles de consumo, generalmente, deben su sentido a la estructura social imperante en cada momento y en cada lugar. Quizás podemos decir entonces que la sociedad contemporánea sigue siendo machista. O no. Porque parece ser que las posiciones de compra están cambiando y ello puede responder a una modificación sociocultural. Un reciente estudio pone de manifiesto que más de la mitad de estadounidenses varones conforman el grueso de compradores de productos alimenticios y para el hogar. De un modo mayoritario, estos productos se dirigen a las mujeres, como público objetivo, pero son consumidos por hombres. ¿Algo falla en la industria publicitaria? Este cambio brusco en la tendencia del público parece responder al efecto de la llamada «crisis económica», que ha provocado un aumento del paro y, por ende, una mayor presencia del hombre en el hogar. Pero es probable que la explicación la encontremos más allá de la coyuntura económica. El hecho es que la tendencia publicitaria recoge un tipo de comunicación empresarial con un carácter mucho más cercano a lo neutral porque el hombre está ahora mucho más presente en el hogar y en las decisiones «menores» de compra. Sin embargo, no conocemos ciertos datos cualitativos que pueden dar luz a este entramado complejo referido al mundo de los consumidores. ¿Acaso la tendencia de consumo y de la publicidad responde a un cambio de estructura social, o es simplemente un lavado de cara, una modificación aparente puesta de moda para alentar a una industria que se ha visto perjudicada por la crisis? ¿A quién quiere más la red del marketing, a papá o a mamá?

Por Javier García

Fuente: http://www.marketingdirecto.com/actualidad/anunciantes/cuando-las-mujeres-dejaron-de-ser-el-publico-objetivo/