Tras la intervención por el Tesoro de Estados Unidos de la Banca Privada ‘ Andorra (BPA), el Banco de España ha reaccionado con rotundidad al someter a control las actividades del Banco de Madrid, filial de BPA. Las acusaciones hacia la matriz por blanqueo de capitales constituyen un asunto grave, de enorme calado social, ya que, y a expensas de los resultados de la investigación, todo parece indicar que la entidad contribuyó a canalizar fondos provenientes de las redes de corrupción rusas. En este sentido, cabe destacar que el motivo de la intervención radica en cuestiones criminales, y no ponen en duda la solvencia de la entidad. Además, de la información disponible hasta ahora, se concluye que fueron algunos directivos los que estuvieron envueltos en estas acciones, por lo que tanto BPA como Banco Madrid tendrían que estar muy interesados en que esta trama se aclare lo antes posible. Así, ha sido el propio consejo de administración de Banco Madrid el que ha dimitido en bloque para facilitar el trabajo a los interventores, también en un intento de desvincularse de las gestiones de su matriz. Moraleja: el problema del blanqueo y del fraude fiscal vuelve a la palestra, y exige una respuesta de las autoridades internacionales para frenar la capacidad de los grandes capitales de mover fondos sin los controles oportunos.

Paso a paso la intervención