Manteniendo constante la mortalidad y una migración nula, la dinámica demográfica de un país depende exclusivamente de los valores que alcanza la tasa de fertilidad (Ayuso, et al. 2014).
Cuando la Tasa de Fertilidad está por encima del nivel de reproducción que, como hemos dicho anteriormente se sitúa en 2,1 hijos por mujer, la población del país crece de forma clásica, dando lugar a una pirámide poblacional tradicional. Si la Tasa de Fertilidad se mantiene estacionaria la población de un país crece al mismo ritmo que lo hace la mano de obra de dicho país. Finalmente cuando la Tasa de Fertilidad es descendente nos podemos encontrar con diversas situaciones:
– Si la Tasa de Fertilidad es decreciente pero su valor está por encima del nivel de reproducción, la población del país al que se refiere dicha tasa de fertilidad envejecerá y dicho envejecimiento se reflejará en un aumento de las diferentes medidas de envejecimiento disponibles (número de personas de edad avanzada, porcentaje de personas de edad avanzada, proporción de personas de edad avanzada sobre la población activa y media de edad de la población). Esto es debido a que las cohortes más jóvenes verán reducido su tamaño con respecto a las cohortes de mayor edad.
– Si la Tasa de Fertilidad descendente se estabiliza en algún nivel por encima de la tasa de reproducción, se producen mayores nivel de envejecimiento en una población nuevamente estable y con un crecimiento menor.
– Si la Tasa de Fertilidad descendente se sitúa por debajo de la tasa de reproducción la población se reduce (experimenta un crecimiento negativo) y se acentúa el envejecimiento de la misma según las cohortes más jóvenes vayan disminuyendo en relación a las cohortes de mayor edad que también disminuyen. En este caso la pirámide poblacional se invierte representándose con una base más pequeña y una cabeza mayor.
Análisis de los Datos para el periodo 1975-2015:
El número de nacimientos es el flujo de entrada más importante en la estructura demográfica de un país. Y como este número está íntimamente relacionado con la estructura demográfica existente (número de mujeres en edad fértil, etc.) su análisis se realizará a través de la tasa de fertilidad o indicador coyuntural de fecundidad.
El número medio de hijos que tendría una mujer de edad comprendida entre 15 y 49 años (edad fértil) , indicador coyuntural de fecundidad (o Tasa de Fertilidad), se ha reducido considerablemente desde los años de origen del estudio pasando de 2,768481 en 1975 a 1,329984 en 2015.
A pesar del ligero repunte experimentado en el año 2008 en el que la indicador de fecundidad se elevó, tras más de 20 años de caída, hasta 1,444423, las cifras asociadas a los últimos años de la serie analizada manifiestan de nuevo una tendencia a la baja alejándose además de forma considerable del valor 2,1 hijos, establecido como referencia para garantizar la reproducción de una población. Este cambio de comportamiento registrado a partir de 2008 coincidiendo con el inicio de la crisis económica, se pone también de manifiesto en el número de nacimientos a partir de ese momento, como veremos a continuación.
Respecto al número de nacimientos, se observa también una tendencia decreciente desde el periodo origen del estudio. A partir de 1975, el número de nacimientos se ha reducido un 37,388% pasando de 669.378 en dicho año hasta 419.109 en 2015. Solo el año 2008 presenta un máximo histórico en 30 años, con 519.779 niños nacidos. Desde entonces, el descenso registrado en el número de nacimientos es del 19,368%